Comparativa entre Web 2.0 y Web3
El futuro de internet según el "2023 State of Crypto Report" de Andreessen Horowitz
La evolución de la tecnología y la aparición de la Web3 han marcado un punto de inflexión en la forma en que experimentamos y utilizamos la Internet. La Web3 constituye un nuevo paradigma que busca crear una web más descentralizada y democratizada, edificada sobre la tecnología blockchain. Esto permite transacciones sin intermediarios y contratos inteligentes que se ejecutan automáticamente de manera más segura, transparente y resistente a la censura que las aplicaciones web tradicionales. En este artículo, analizaremos en detalle las diferencias clave entre la Web 2 y la Web3, basándonos en el "2023 State of Crypto Report" de la empresa Andreessen-Horowitz (a16z), una de las principales firmas de capital de riesgo en el mundo de la tecnología y las criptomonedas.
Modelo de confianza: En la Web 2.0, la confianza recae en la empresa que administra los servidores, servicios y software, todos centralizados. Esto significa que los usuarios deben confiar en la integridad y seguridad de la organización que controla sus datos. Por el contrario, la Web3 utiliza redes descentralizadas peer-to-peer que requieren mínima confianza. En lugar de confiar en una entidad central, los usuarios confían en el protocolo (software) que rige la red y que está diseñado para ser transparente, seguro y resistente a la censura.
Gobernanza: La gobernanza en la Web2 está concentrada en unas pocas empresas, conocidas como gigantes tecnológicos (Big Tech), que ejercen un gran control sobre el ecosistema. En contraste, la Web3 adopta un enfoque más democrático a través de organizaciones autónomas descentralizadas (DAO). Estas organizaciones distribuyen el poder entre los stakeholders (poseedores de tokens de gobernanza), permitiendo una mayor participación y toma de decisiones descentralizada.
Modelo de negocio: En la Web 2.0, los proveedores de servicios utilizan los datos de los clientes para generar ingresos, a menudo vendiendo información a anunciantes y otras empresas. Sin embargo, en la Web3, el modelo de negocio cambia significativamente. La red de igual a igual paga a aquellos que validan las transacciones, creando incentivos para mantener y mejorar la red sin depender de la explotación de datos de los usuarios.
Contenido: En la Web 2.0, los usuarios generan contenido que a menudo es propiedad de gigantes digitales, quienes pueden explotarlo comercialmente. Además, el contenido en la Web 2.0 se puede duplicar fácilmente. La Web3, al contrario, permite a los usuarios ser dueños de su propio contenido y asegura que cada pieza pueda ser un activo digital único (NFT), cuya autenticidad es verificada por la red descentralizada.
Participación del usuario: La Web 2.0 ofrece servicios gratuitos a cambio de los datos del usuario, y las empresas intermediarias se benefician de ejecutar servicios y software. En la Web3, los usuarios son dueños de sus datos y contenido y pueden monetizarlos. Además, los pagos se realizan directamente a los validadores de transacciones entre pares
Interfaces de usuario: Las interfaces de usuario en la Web 2.0 incluyen sitios web, redes sociales y aplicaciones móviles. Estas interfaces están controladas por empresas centralizadas y pueden ser susceptibles a la censura y al control de la información. En la Web3, las interfaces evolucionan hacia aplicaciones descentralizadas (dApps), que permiten una mayor transparencia y resistencia a la censura. Aunque todavía hay mercados y servicios centralizados, la tendencia es hacia la descentralización.
Autenticación del usuario: La Web 2.0 se basa en identificadores de usuario, contraseñas y datos biométricos. Estos métodos pueden ser vulnerables a robos, hackeos y violaciones de seguridad. La Web3 mejora la seguridad de la autenticación al utilizar claves privadas criptográficas que desbloquean el acceso a los registros del usuario en la blockchain. Estas claves privadas se almacenan en billeteras digitales, proporcionando un nivel de seguridad y control mucho mayor sobre la información personal.
Sistema financiero: El sistema financiero en la Web 2.0 está administrado centralmente por bancos centrales e intermediarios, lo que puede resultar en ineficiencias y costos adicionales para los usuarios. La Web3 revoluciona el sistema financiero al ser administrado por software, mediante contratos inteligentes y protocolos de blockchain. Esto elimina la necesidad de control centralizado y de intermediarios que cobren tarifas, aumentando la eficiencia y reduciendo los costos para los usuarios.
Moneda: La moneda en la Web 2.0 es la moneda fiduciaria, respaldada por gobiernos y administrada centralmente. Esta moneda puede estar sujeta a inflación, devaluación y manipulación por parte de las autoridades. La Web3, por su parte, introduce las criptomonedas, que están integradas en blockchains descentralizadas y no están controladas por ninguna entidad central. Las criptomonedas ofrecen una mayor transparencia, seguridad y resistencia a la censura en comparación con las monedas fiduciarias
A modo de resumen:
De acuerdo con el "2023 State of Crypto Report" de Andreessen Horowitz, la Web3 representa una oportunidad única para transformar el internet y empoderar a los individuos en lugar de a las corporaciones. Al adoptar la tecnología blockchain, la Web3 posibilita modelos de negocio innovadores como las finanzas descentralizadas (DeFi) y los tokens no fungibles (NFTs), los cuales permiten un mayor control y propiedad de los datos y los activos digitales. En última instancia, la Web3 tiene el potencial de crear un internet más abierto, justo e inclusivo, marcando un cambio importante hacia la descentralización y la gobernanza comunitaria.
Este artículo se basa en el "2023 State of Crypto Report" publicado por Andreessen-Horowitz, una firma líder en capital de riesgo en el mundo de la tecnología y las criptomonedas. Para acceder al informe completo en PDF pulsa aquí.